VICTORIA, DESCENSO Y ENCERRONA

Para olvidar este fin de semana, a no ser por la victoria con goleada, ya se lo merecía, del "B" ante el Tasarte. El descenso, esperado, del Preferente, pero sobre todo el trato recibido en 7 Palmas por el Alevín marcan la nota triste.

El viernes se presentaba el Teror, que se auto proclamó "enemigo", a tenor de lo visto. Grabación del partido, Policía en el campo durante todo el encuentro, 6 agentes que no se movieron de la zona de vestuarios hasta que acabo el mismo; hasta el Vicepresidente de la Federación asistió como observador.
El partido no fue malo, muy disputado por ambas partes en el que nos adelantamos en el marcador y ocasiones tuvimos para irnos al descanso con mayor ventaja, aunque el Teror también pudo anotar si no es por la actuación de Suso, que volvía a la portería, después de casi toda una vuelta. Empataron los de la Villa Mariana al filo del descanso, y la segunda mitad tuvo como protagonista al colegiado, que no tuvo la suficiente personalidad para señalar dos penas máximas, una a Samu al regatear al portero que le derriba y otro a Nauzet que cuando iba a rematar desde el punto de penalti y fue trabado por atrás, de esto tiene que haber prueba filmada, pero hará que pedírsela a la gente de Teror.
Dos goles con un poco de fortuna hicieron que los tres puntos se marcharan para Teror, y con ellos quedaba desconectada la maquinaria que nos mantenía con vida aunque clinicamente muertos en Preferente.
Del filial nada que añadir a lo comentado al principio, victoria contundente ante un rival que eso si ofreció poca resistencia y que permitio a los nuestros divertirse jugando y marcando goles.
El Benjamín se presentaba una vez mas mermado, ante el Virgen del Pilar y los chiquillos dieron la cara mientras las fuerzas le acompañaron, al final cayeron por 9 a 5, pero lo mas importante es aguantar hasta el final los dos partidos que quedan a pesar de todas las adversidades.
El Alevin se desplazaba hasta Siete Palmas, donde nos esperaba una encerrona, queremos pensar que no premeditada por parte de una afición muy numerosa, del orden de  50 o 60 exaltadas madres y padres que se dedicaron a increpar y a insultar a los nuestros, creyéndose en posesión absoluta de la educación y el buenhacer futbolistico. Las entradas que sus niños hacían eran parte del fútbol, las nuestras eran de golfos y sinvergüenzas, de "niños de barrio" como ya nos calificaron cuando jugaron los benjamines, y ellos ¿de donde coño vienen?. Es verdad, somos de barrio, pero cuando eso se utiliza para insultar y menospreciar a tus semejantes es mas despreciable por parte de quien lo hace, sin olvidar que algunos si no todos los que ahora se creen privilegiados papas y mamas de "niños de zona residencial" fueron "niños de barrio", y sus padres, hermanos, sobrinos, etc, lo siguen siendo así que estarán avergonzados de ellos.
Al final uno de ellos tirando quizás de su "turbio pasado de barrio", eso si arropado entre la multitud agredió con una patada en la boca a uno de nuestros tres padres, una abuela y cuatro madres que fueron al partido.
El "parte" de 7 Palmas se saldó con dos labios rotos, uno de un niño y otro de un padre, pero no pasa nada eso es parte del fútbol, los golfos somos nosotros.